SUS OJOS SIEMPRE PUROS, PAUL ÉLUARD |
SUS OJOS SIEMPRE PUROS, PAUL
ÉLUARD
Días de espejos rotos y de agujas perdidas
Días de párpados cerrados al horizonte de los mares,
De horas iguales siempre, días de cautiverio.
Mi espíritu que aún refulgía en las hojas
Y las flores, mi espíritu como el amor desnudo,
La aurora que se olvida le hace inclinar el rostro
Y contemplar su cuerpo obediente e inútil.
Pero yo vi los ojos más hermosos del mundo,
Dioses de plata que tenían zafiros en sus manos,
Dioses completamente, pájaros en la tierra
Y en el agua, los vi.
Sus alas son las mías, nada existe
Sino su vuelo que sacude mi miseria,
Vuelo de estrella y resplandor,
Infinita llanura, río, roca, su vuelo,
Las olas claras de sus alas,
Mi pensar sostenido por la vida y la muerte.
(Capitale de la doleur, 1926.)